Contigo
Ayer era fiesta en su ciudad. Y no fue a esquiar. Ni a Madrid o Barcelona de museos. No acudió a citas cinéfilas ni tampoco teatrales. Ni siquiera aprovechó para dormir, comer un dulce roscón o cantar bajo la ducha.
Su tiempo fue para ir a ver un Gernika muy especial, con colores a rebosar; un Gernika con olor a tiza y pinceladas de ingenuidad.
Desde ayer, mi cole es diferente porque él lo inundó de su aroma.
Ayer le vi más grande, con una envergadura diferente. Frente a la estatura de mis peques, su talle creció, como también lo hizo el tamaño de su sonrisa.
Ayer fue fiesta en mi cole.
Desde que existes en mi vida,
(Gracias, mi amor, por llevarme de la mano en el mundo de la música y enseñarme a disfrutar de preciosidades como ésta. Quiero saber más y más y que seas tú quien me haga reinventar los lugares más recónditos de cada canción. Descubrir contigo las melodías más suaves, las óperas más emocionantes, los acordes más inquietantes. Descubrir el placer de vivir tu disfrute. Mua.)